ROMPAMOS BARRERAS (NO SOLO LAS FÍSICAS)

Las Fundaciones Tutelares tenemos como principal misión apoyar la toma de decisiones y dar protección a personas a las que se ha modificado judicialmente la capacidad de obrar. Sin embargo, estamos cambiando el fondo y la forma de cómo trabajamos para alcanzar estos objetivos. Ya no hablamos de incapacitación sino de apoyos a personas con discapacidad, ni de representarlos sino de complementar su capacidad de decidir. Es por ello que estamos cambiando de forma profunda la forma de abordar esta protección, poniendo énfasis en potenciar sus capacidades para poder decidir y, así respetar al máximo su voluntad, la autodeterminación y la autonomía en la toma de decisiones y , en todo caso dialogando constantemente para hacerlos conscientes de las consecuencias de los distintos caminos que pueden tomar. Todo el mundo debe poder tener el derecho a equivocarse.

Por tanto, se trata de romper barreras, y no sólo las físicas, sino también las barreras mentales que tenemos las personas profesionales que intervenimos con personas con discapacidad. Se deben dejar atrás actitudes demasiado paternalistas, pensando que decidiendo por ellos hacemos un bien y, de esta manera los infantilizamos y quizás en algunas ocasiones o bien tomamos decisiones pero sin que sea la mejor opción. Asimismo, también las propias personas con discapacidad a las que se plantea la responsabilidad de ser más protagonistas de las decisiones de su vida cotidiana y también de las decisiones trascendentales, deben ser más conscientes de lo que significa tomarlas.

Hay que tener presente que cada año en Cataluña crecen el número de personas con discapacidad que necesitan estos soportes, en unas ochocientas personas. Nuestra Fundación también ha gozado de este crecimiento en el ámbito de las comarcas centrales hasta llegar a apoyar a más de 130 personas. Es por ello que esta evolución positiva ha ido en paralelo a realizar un trabajo de reflexión y de cambio de paradigma para ser más respetuosas con su voluntad, sin perder de vista que nuestra principal finalidad es proporcionar una vida digno y plena y , garantizar el máximo bienestar físico, emocional y social. En esta línea, la Fundación Tutelar Santa María de Comabella ha preparado a todo el equipo de profesionales en esta filosofía y, junto con otras entidades del territorio como Althaia, otras Fundaciones Tutelares del territorio, los colegios profesionales de trabajo social, abogados o médicos o entidades de salud mental, hace divulgación de esta forma de trabajar reforzando, así, la red de atención a las personas con discapacidad.